¿Qué pasa con el ácido láctico después del ejercicio?


¿A dónde se va el ácido láctico o cuál es el destino del ácido láctico que se produce después de hacer algún ejercicio físico intenso?

Creo que aunque esta no es una pregunta muy usual por parte de las personas que asisten a los gimnasios, es bueno saberla de igual forma principalmente aquellos instructores (as) que les gusta ir más allá y llenarse de conocimientos fisiológicos bien fundamentados.

Mucho se habla del ácido láctico en los gimnasios, que se elimina, que se recicla, que sirve como energía, que produce fatiga, etc.

Y muchas de estas cosas si suceden y/o son causa de acumulaciones excesivas de ácido láctico en la sangre (lo cual puede disminuir el pH sanguíneo cuando se acumula de manera excesiva, y produce un riesgo de muerte), así que en este artículo explicaré el destino de cada porcentaje de ácido láctico producto de un ejercicio anaeróbico lactacidémico (que usa el glucógeno intramuscular como sustrato energético para la resíntesis de ATP, y su producto es el ya mencionado ácido láctico).

Antes de continuar con la mención de los destinos del ácido láctico, me parece oportuno aclarar que no todo ejercicio físico de carácter intenso lo produce, como es el caso de la carrera de 100 metros, en donde a pesar de ser una actividad bastante intensa, la misma es "fatigadora" porque se agotan las reservas de fosfocreatina en los músculos esqueléticos (y por el déficit de oxígeno), y el ácido láctico no se produce precisamente porque es el mecanismo energético de la fosfocreatina el que entra en acción.
Igual sucede con la halterofilia en donde se realizan levantamientos con potencia máxima en un muy corto período de tiempo, en donde igualmente prima el mecanismo de la fosfocreatina.

Así que para que hubiese conexión del mecanismo anaeróbico lactacidémico, en la carrera de 100 metros el atleta debería seguir corriendo (obviamente no con la misma velocidad porque sería algo imposible) sin parar por lo metros 400 metros más (entre más distancia, más ácido láctico se producirá siempre y cuando las pulsaciones por minuto se mantengan por encima de las 150).

En el caso de la halterofilia, el competidor debería mermar un poco el peso y hacer muchas repeticiones para que el mecanismo lactacidémico entre en acción.



En los entrenamientos con pesas en los gimnasios, cuando se realizan rutinas de series de 12-15 repeticiones, con pesos sub-máximos del 70-80%, con descansos entre series de 30-90 segundos (o menos), si que entra en acción el mecanismo energético lactacidémico, generando una gran producción de ácido láctico, lo cual se manifiesta con esa "quemazón" en cada serie que no permite hacer una repetición más, y por lo mismo habría que dar un tiempo de descanso para poder realizar otra serie.

Muchas personas optan por estirar los músculos trabajados entre series (lo cual No recomiendo), para supuestamente hacer que el ácido láctico abandone más rápido las fibras musculares esqueléticas y se pueda realizar la siguiente serie con mayor facilidad.

Pero ésto es erróneo, porque los estiramientos No tienen algo que ver con el ácido láctico, sino con la "evacuación" o "recogimiento" de los iones bivalentes de calcio (Ca++) y algunos desechos que se generan producto de la fisiología del proceso contráctil (contracción muscular).

"Relajar" el músculo para volverlo a someter a un trabajo con cargas "retadoras" puede aumentar el riesgo de lesión (lo cual explico en el link que he dejado en azul en donde digo que estirar entre series no es recomendado).

Entonces, ¿cuál es el destino del ácido láctico?



Aproximadamente el 70% del ácido láctico total producido se oxida, es decir que sirve como recurso energético para las fibras musculares esqueléticas de contracción lenta (y también para las fibras miocardiales).

Es decir que en el pos entrenamiento con pesas, cuando una persona decide rematar con algo de cardio a un ritmo moderado (que es lo más recomendado), es decir hasta o por debajo de las 150 pulsaciones por minuto, gran parte de este ácido láctico abandonará el organismo en una especie de "combustión" energética.



De ahí que el tiempo de cardio después de las pesas deberá ser relativamente extenso (40-60 minutos) si además de querer que el ácido láctico abandone el organismo más rápido (para evitar una posible fatiga muscular), se busca una "quema" de grasa pronunciada o decente.

¿Por qué? Porque si por ejemplo una persona requiere X cantidad de energía por medio de la oxidación de ácidos grasos (grasas de reserva) en 30 minutos, después de un ejercicio intenso por la producción del ácido láctico, éste aportará algo de energía para ayudar a esa X cantidad de ácidos grasos para esos 30 minutos.

Si se hace el cardio por 40-60 minutos en otra hora del día, es decir sin haber entrenado pesas antes, y si se mantienen las pulsaciones por minuto hasta o por debajo de las 150, el mecanismo energético oxidativo aportará casi que el 100% de la energía a través de los ácidos grasos, es decir que se producirá la "quema" de grasa casi que exclusiva.

El 20% del ácido láctico total producido se irá a ser "reciclado" por medio de la gluconeogénesis a través del ciclo de Cori.

En otras palabras, este porcentaje de ácido láctico se convertirá de nuevo en glucógeno por medio del hígado a través del ciclo o proceso bioquímico mencionado. El tiempo de este "reciclaje" varía en cada persona.

El 9% del ácido láctico total producido será utilizado en la síntesis de algunas proteínas, proceso que se llevará a cabo en el hígado.

El 1 o 2% del ácido láctico total producido será eliminado a través de la orina o el sudor.

De lo anterior puede surgir la siguiente pregunta: ¿Por qué el organismo No elimina todo el ácido láctico producido a través de la orina, lo que significaría una recuperación muscular "absoluta"? La respuesta es "por simple economía", es decir que el organismo no eliminará rápidamente algo que sabe que podrá reutilizar en procesos energéticos ya mencionados.

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